Archivo de la categoría: Colecho

4 años

Imagen

4 años

4 años, 4 ya.

4 años hace que llegaste a mi vida, 4 años de plenitud, de felicidad, de sueños cumplidos.

4 años son los que han pasado desde que viniste para sanar mi cuerpo y mi alma. Para enseñarme cual es el verdadero amor, el amor incondicional, sin porques, sin comos, sin peros. Amor auténtico, puro e infinito.

4 años hace que llegaste, para llenar de luz la oscuridad, para llenar de calor el frío, para llenar el hueco, tu hueco, mi corazón

4 años de aprender día a día, de ser tu alumna, de aprender de ti a sonreir, a disfrutar y a ser feliz con lo mínimo. 4 años como maestra tuya, en respeto, cariño y comprensión.

4 años de aventuras, de lactancia, de compartir espacio noche tras noche, de abrazos, besos y te quieros. 4 años de felicidad completa y absoluta.

Gracias Tuti, gracias por elegirme, por llegar, por quedarte. Gracias, porque sin ti yo hoy no sería la mujer que soy.

Te quiero, desde el día que naciste y hasta mi último aliento.

Salir del armario (y sin pelos en la lengua)

Estándar

Pues eso, salir del armario. Y no, no os vayáis a pensar que hablo de mi sexualidad, esa de momento está bien definida.

Hablo de todo aquello que rodea mi maternidad, y que en mayor o menor medida, guardo para mi, de lo que ya no hablo públicamente para evitar las críticas, las caras raras o la desaprobación. Porque hay quien se atreve a hablar de más, obligándonos a las demás a hablar de menos, y se acabo.

Hablo de mi lactancia, aquella de la antes hablaba sin problema, y de la cual evito hacer ahora en sitios públicos, en mi Facebook, y en lugares varios. Y hoy me destapo ante todos, porque me da igual con que cara me miréis, o lo que opinéis. SÍ, doy teta, a diestro y siniestro, a dos niñas, una de ellas, a escasos tres meses de cumplir los 4 años. Maravillosa lactancia en tándem que lo único que me da es satisfacción y orgullo, y que bajo ningún concepto ha de ser motivo para esconderse. ¿Te parece anormal? ¿Qué es lo normal? ¿Destetar a los 6 meses?. Sólo un dato, la edad normal del destete oscila entre los 2 y los 7 años. Ahí lo dejo.

Aquí estaba yo embarazada de 34 semanas, y Tuti tenía 29 meses.

Aquí estaba yo embarazada de 34 semanas, y Tuti tenía 29 meses.

¿Qué pasa porque quiera respetar los ritmos de mis hijas?¿Porqué habría de quitarle a mi hija mayor esos momentos únicos?¿Porqué tengo que darle la teta en casa, lejos de miradas hipócritas, de críticas más o menos directas o veladas?, pues no, no me da la gana. Al que no le guste, que mire hacia otro lado, si quieres mirar, hazlo con respeto, y si no lo vas a hacer así, coge tus cosas y vete, no eres bienvenido. ¿Qué hacemos malo, sucio o incorrecto?, nada. Lo malo, lo sucio, lo incorrecto, está en los ojos del que mira.

Y por si hay dudas, no, no me agobia, no me desgasta, no acaba conmigo ni con mi libertad. Porque en mi libertad está el haber elegido hacer las cosas así

Y para muestra un botón....¿no te gusta?....este no es tu sitio

Y para muestra un botón….¿no te gusta?….este no es tu sitio

También hablo del colecho. ¿He de esconder que duermo con mis hijas?, ¿qué he de responder cuándo alguién nos pregunta dónde duermen mis hijas?, pues chic@, la verdad. Luchi duerme entre papá y mamá, y Tuti en un colchón al lado de nuestra cama. Y desde luego, esto no tiene pinta de cambiar a corto plazo.

Hace unos meses, Andrea decidió por voluntad propia ir a dormir a su habitación (porque sí, tienen habitación, ¿qué os pensabáis?), hasta que una noche dijo que volvía con nosotros. Y como eso era lo que yo además deseaba, su cama seguía donde la había dejado unas semanas atrás. ¿Porqué enseñarla a dormir sola, si la mayor parte de su vida, muy seguramente, duerma acompañada?. Ya querrá ella su intimidad, y será quien se vaya, ningún adolescente duerme con sus padres. Mientras tanto, nuestro dormitorio es de 4.

Y ya me da igual que me digan o me dejen de decir, es nuestra casa, nuestra familia, y nosotros decidimos. Quien haga las cosas de otra manera, felicidades, has elegido tu camino y lo estás siguiendo, ¿aceptarías mis críticas?, seguramente no, por eso me las ahorro. Además, tampoco es que me interese demasiado, asíque, ni pregunto. Así que, procura hacer tú lo mismo.

Este es nuestro dormitorio. Cama de matrimonio en la que dormimos con Luchi, y un colchón para Tuti, que comparte espacio con nosotros.

Este es nuestro dormitorio. Cama de matrimonio en la que dormimos con Luchi, y un colchón para Tuti, que comparte espacio con nosotros. La cuna simplemente es un tope para que la peque no se caiga al suelo.

¿De qué más hablo?, ah sí, porteo, brazos. Nadie dice nada por que lleve a Luchi en un portabebé, o que la tome en brazos, claro, ¡¡tiene 15 meses!! (y aún así, habrá quien me diga que está mal acostumbrada…ejem). La cosa cambia cuando a quien porteo es a Tuti, o si la tomo en brazos. ¡Porfavor, si es grandísima!….lo que tiene son mimos. Claro, ¿qué si no?. Pero precisamente porque tiene mimos, a mi me encanta, y no se los voy a negar. Si me vieráis por casa con cada niña en un brazo…pesan, claro que pesan, pero vamos, nada con lo que no pueda. Eso sí, no intentes hacerlo si no lo has hecho antes, esto se consigue como las pesas del gimnasio, poco a poco y con constancia. Si lo haces de buenas a primeras con una niña de 15kilos y otra de 10, es posible que un niño bese el suelo, y nada más lejos de mi intención.

¿Qué pasa si Tuti me pide que la coja en brazos en la puerta del cole hasta que sale la profesora?, NADA, que coño va a pasar…lo hago porque ella así lo quiere, y porque a mi, no me parece nada malo. Lo que si me parece malo, es la mala baba de la gente que se acerca y le dice cosas como «si ya no eres un bebé», «tú tenías que estar en el suelo y no en brazos», perdona colega, tú que eres un/a «metomentodo», mejor te callas y dejas en paz a mi cría, ¿te importa? Yo no te digo que tienes que hacer, ni te pregunto nada, entre otras cosas, porque ni lo sé, ni me interesa. ¿Qué vuestros hijos van andando a todos los sitios?, que bien, salid a celebrarlo, ¿qué quieréis que os diga?.

En fin, que si no lo digo, exploto. Que mis hijas, mi marido y yo, hacemos lo que queremos, somo nosotros quienes decidimos, y que de hoy en adelante, no me escondo, ni me callo más. A dar teta a cualquiera de las dos donde se tercie, a dormir como nos de la gana y diciéndolo bien alto y claro, y llevando en brazos a mis hijas al fin del mundo. Salgo del armario, que ya estaba lleno de telarañas y me molestaban un poco. Y salgo para no volver a entrar, ala, que ya está bien, que porque a ti, o a ti, o a ti, no te guste lo que hago, no voy a dejar de hacerlo, si no te gusta, simplemente vete, coge tus cosas y vuelve por donde viniste. No conozco tu opinión, pero tampoco quiero saberla, si yo no me meto en tu casa, tú no te metas en la mía. Y si vas a meterte, hazlo en mi armario, te he dejado un buen hueco.

Y como una es así de rara, os dejo algo que no tiene nada que ver, pero como seguramente habrá quien se esté muriendo de ganas de decirme cuatro cosas, que vea este vídeo y se relaje, a mi me da buen rollo, así que espero que a ti, que tanto te ha molestado lo que he escrito, también te deje un buen sabor de boca y menos ganas de meterte donde no te han llamado.

http://www.youtube.com/watch?v=cdoauitslGc

 

Yo ya he salido del armario, ¿sales tú también?